Catedral Basílica de Santa Ana

DOMINGO III DE ADVIENTO

Bienvenidos a este tercer domingo de Adviento, en el que la tónica principal es la alegría, lo que es enfatizado por la antífona de entrada de esta fiesta del Señor. ¨Estad siempre  alegres¨ esta es una consigna repetida en el Adviento que debe permanecer todo el año, pues esta es una de las características del Cristiano. El Señor esta cerca, su proximidad no debe ser motivo de tristeza sino de gozo.

En la primera lectura de hoy, tomada del libro del profeta Isaías, podríamos ver como el punto final de las profecías de Isaías relacionadas con el Mesías, escucharemos la más preciosa continuación y culminación de cuanto el profeta había predicho de la futura teocracia mesiánica, es la expresión plástica de la ilusión y confianza totales en Dios de un pueblo en el destierro, carente de todo aquello que había constituido las delicias de su corazón.

El apóstol Santiago, en la segunda lectura de este día, aconseja la paciencia, que debe entenderse no principalmente en el sentido de la permanencia o continuación en el camino emprendido, sino en el sentido que habitualmente damos a esta palabra de resignación casi pasiva, aunque sea con la esperanza puesta en Dios.

El evangelio de hoy es del libro de Mateo, en el habla sobre Juan el Bautista, quien se presentó en el desierto de Judea predicando  un ¨bautismo de penitencia para la remisión de los pecados¨. Pero la razón última de su misión estaba en anunciar ¨al que había de venir¨, el era el mensajero, el heraldo que había de venir a anunciar la presencia del Mesías y a preparar sus caminos. Era el precursor del Mesías.

Este es el enlace de las lecturas y el vídeo de la liturgia de la Palabra de este domingo.

DOMINGO II DE ADVIENTO.

En este segundo domingo de adviento, la Iglesia nos presenta a Juan Bautista, llamándonos a la conversión de corazón. Mientras que el mensaje de Juan es severo, el profeta Isaías, en la primera lectura, nos presenta un rey ideal dotado de los dones del espíritu y cuyo reinado nos traerá la paz y la justicia. Nosotros los cristianos, sabemos en fe, que Cristo vino a este mundo y que constantemente nos ofrece sus dones.

Estas son las lecturas de este domingo así como el vídeo de la Liturgia de la Palabra.

DOMINGO I DE ADVIENTO.

Hoy, primer domingo de adviento, empieza la Iglesia un nuevo año litúrgico. Con la primera venida de Cristo, su muerte y resurrección y por medio de nuestro bautismo hemos entrado en la etapa final de nuestro caminar hacia Dios, etapa que no se consumará hasta la venida final de Cristo. Su venida en gloria nos sorprenderá a todos, por eso, debemos estar siempre listos para cuando Él venga. Estemos atentos a Dios, quien viene ahora a nosotros, a través de su palabra y Eucaristía, con el fin de prepararnos para la segunda venida de Jesús.

Estas son las lecturas de este domingo y el vídeo de la celebración de la Palabra.

IV DOMINGO DE ADVIENTO

Bienvenidos todos a la celebración de cuarto domingo de Adviento. Estamos todavía en la sala de espera. Es tiempo de ansiedad y de silencio, de oscuridad y de oración. La noche santa no ha llegado aún, pero la preparamos con fervor. El Adviento continúa. Olvidemos los comerciales y escuchemos el anuncio gozoso de la liturgia: el Señor nace y viene. 

En la primera lectura el profeta Miqueas nos recuerda la manera cómo Dios actúa. Elige un pueblo insignificante, Belén, para el nacimiento de Jesús. Miqueas, desilusionado con los reyes de Israel, anima al pueblo a esperar la venida del Mesías. La comunidad cristiana ve cumplida las profecías en Jesús, príncipe de la paz. En esta espera los cristianos tenemos que ser los constructores de la paz mesiánica.

San  Pablo en la segunda lectura en la carta a los Hebreos une el pesebre de Belén con la cruz del Gólgota, une el nacimiento y la muerte. Jesús viene a nosotros como el siervo obediente. Hacer la voluntad del Padre es lo único que le importa.

Y en el evangelio San Lucas nos relata cómo a través de María, Dios se hizo presente en el mundo. Nosotros los creyentes estamos llamados como María a albergar la presencia divina de Dios en nuestros corazones.

Estas son las lecturas de este domingo y el vídeo del evangelio.

III DOMINGO DE ADVIENTO.

Hermanos y hermanas, bienvenidos a la Eucaristía en este tercer domingo de Adviento. La liturgia de este fin de semana es una invitación a alegrarnos en el Señor. Él viene y se hace presente en medio de la comunidad. Nosotros renovamos nuestro espíritu y nuestro corazón, aceptamos y vivimos nuestro bautismo, oramos con fe y celebramos su presencia sacramental en medio de nosotros.

En la 1ª lectura grita de alegría, hija de Sión, porque Dios está en medio de ti. El Dios con nosotros nos protege y es fuente de fe y valor en este adviento para los que saben reconocer su venida. Ciertamente, Dios ya está en medio de nosotros, por eso podemos comenzar a gritar nuestra alegría.

Pablo exhorta en la segunda lectura a los Filipenses a dejar a un lado sus preocupaciones sobre el retorno del Señor. Esos cuidados e interrogantes y todas las necesidades hay que ponerlas en manos del Señor. A nosotros nos toca trabajar, orar, prepararnos y estar alegres porque el Señor vino, viene y vendrá.

Y por último en el evangelio Juan nos exhorta un domingo más a preparar los corazones para recibir al Señor. Juan nos invita a la conversión, al arrepentimiento y a compartir.  Juan pide a sus oyentes justicia y compasión.  Otro vendrá que exigirá la perfección, vivida con la ayuda de Dios.

Estas son las lecturas de este domingo y el vídeo del evangelio.

II DOMINGO DE ADVIENTO.

Iniciamos hoy la segunda semana de Adviento -todavía en su «etapa escatológica», de cara al futuro último- con la mirada puesta, de nuevo, no sólo en la Navidad de este año, sino en la venida gloriosa de Cristo al final de la historia.

Hoy se nos invita a la alegría por Jesús, a quien esperamos, y a preparar los caminos del alma para recibirle. La Palabra de Dios que  hoy nos invita a preparar el camino del Señor. La palabra de los profetas quiere levantar al pueblo de su postración anunciándole que Dios está a punto de cambiar su suerte. Baruc y Juan Bautista tratan de concienciar a sus oyentes para que preparen el camino al Señor retirando de él todo obstáculo e impedimento.

Estas son las lecturas de este domingo y el vídeo del evangelio.

Translate »